Mientras que en Occidente el
estar en los huesos y morena parece que se ha convertido en el canon de belleza por
excelencia, en países como Marruecos ese perfil dista mucho de ser el más deseado.
Recuerdo como, especialmente en
verano, me quejaba de lo feo que quedaba en las fotos mi color de piel al lado
de tanto morenazo. Y ellos, mientras señalaban su piel, se quejaban
precisamente de lo mismo. ‘Blanco bueno,
negro no bueno.’
En el país vecino, como ya he
contado varias veces, hay un sin fin de rituales en torno a la comida. Son
innumerables las veces que los marroquís comen a lo largo de un día y, mientras
que a los hombres les acompaña una genética envidiable digna de ser estudiada, analizada y examinada ,
las mujeres suelen tener bastantes problemas de obesidad. A ellas se
les nota bastante más ese non-stop, pero tanto los hombres como las mujeres comen una barbaridad y, cuando convives con ellos, de repente todos se convierten en tu abuela y se desviven para que comas tanto o más que ellos. Y aunque, por desgracia, entre los jóvenes cada vez está cogiendo más fuerza el canon de belleza occidental, normalmente las mujeres delgadas pero con curvas, con culo, con pecho y con
caderas, les resultan mucho más atractivas, más sensuales, más femeninas. Más sanas.
Cuando rechazas comida te
intentan hacer ver que estar delgada no es saludable, que tienes que comer, que te
vas a poner enferma y que estar tan seca no te sienta bien. En definitiva,
¡que dónde vas con una talla 38!
Lo mismo ocurre con el color
de piel. Mientras que en Occidente el estar tostadísimo, incluso en pleno
invierno a menos siete grados, es ya la obsesión y enfermedad de muchos, en otros países se busca
precisamente lo contrario. Es cierto que las mujeres en Marruecos no suelen llevar
maquillaje más allá de köhl para los ojos, pero las que lo hacen utilizan
base blanca para disimular que son morenas. Todo tan coherente como en Occidente. Lo peor es que algunas están igual de
zumbadas que otras europeas y,
especialmente en las bodas, parecen haber metido la cara en un saco de harina con
arsénico y son auténticas muñecas de porcelana. ¡Con lo guapas que están muchas con la cara lavada y recién peiná, recién peiná, recién peiná!
Siempre he dicho que los hombres y las mujeres más impresionantes que he visto en mi vida los he visto
precisamente en Marruecos. Y de los niños y niñas ya mejor ni hablamos. Esas mujeres con un color de piel envidiable, unos ojazos negros o verdes enormes que
quitan el sentío, una boca preciosa,
unos rasgos increíbles… pero obsesionadas y empeñadas en untarse la cara con polvo blanco para
quedar, con ánimo de ofender, hechas un cuadro. Supongo que, de alguna manera, relacionan
el ser blanco con ser rico y con ser europeo, y pierden el norte al llevar esa ida al extremo.
Y con el pelo más de lo mismo;
mujeres con un pelazo largo negro brillante completamente locas con mi color de pelo por ser igual
que el de Lalla Salma, la mujer del rey de Marruecos.
Parece evidente que nunca
llueve a gusto de todos y, mientras los cánones de belleza varían mucho de un
lugar a otro, el desear y envidiar siempre lo que no tenemos parece un
sentimiento bastante común a ambos lados del estrecho.
Esto mismo se podría aplicar aquí en Senegal, así tal cual.
ResponderEliminarLa comida es un ritual sagrado y si sorprendes a una familia comiendo cuando vas de visita tienes un protocolo de unas 200 frases educadas para explicar que estás bien, que no tienes hambre o que tienes un compromiso con comida de por medio para el que debes reservar tu estomago. Esta última es, normalmente, la única que aceptan como válida. Eso si, nunca digas que no te apetece porque ¿¡como no te va apetecer comer!? Más sorprendente aún cuando estás comiendo, que te instan a comer aunque tengas ya la boca llena. Jajajaja es fantástico :)
Y respecto a la obsesión del ser tan blanco como se pueda igual. Cuando pasas una foto por photoshop vienen a asegurarse que no los pones mas negros o, a poder ser, que los dejes menos oscuros. En bodas y fiestas más de lo mismo: mujeres con la cara como un cuadro que estarían preciosas sin maquillaje. Incluso he llegado a ver polvos de cara con tonos verdes, porque dicen que así si les ilumina un foco aumenta la sensación de blancura...En definitiva, que con lo guapísimas que estarían con la cara lavada ellas prefieren el color Shrek por eso de "blanco bueno, negro malo"...
Aun más grave es las mujeres que se someten a tratamientos muy chungos para cambiar el color de piel, la cual se les va quemando con el tiempo hasta parecer 20 años más vejas de lo que son.. Algo que indica lo muy nocivo para la salud que es. Todo sea por la blancura...
ResponderEliminarCARLOTA
tu tienes una gran parecido fisico a Lalla Salma,NO DUDO que te lloveran los pretendientes marroquie!