25 de mayo de 2015

AIN NOKBI, FEZ

En ningún barrio la vida me ha dado tanto.
En ningún barrio me hice tantas preguntas.
En ningún barrio encontré tantas respuestas.
En ningún barrio me sentí tan vulnerable y, a la vez, tan protegida.
En ningún barrio dejé lágrimas tan sinceras.
En ningún barrio recogí sonrisas tan reales.
En ningún barrio tuve los sentimientos tan a flor de piel.
En ningún barrio aprendí más sobre mí misma.
En ningún barrio des-aprendí tanto.
En ningún barrio (con)viví tan de cerca con la cara más cruda de Marruecos.
En ningún barrio fui tan consciente de la realidad.
En ningún barrio abrí tanto los ojos que necesité cerrarlos para entenderlo.
En ningún barrio supe mejor lo que es la dignidad.
En ningún barrio la llamada a la oración en mitad de la noche me hizo estremecer igual.
En ningún barrio se me encoge tanto el corazón.

Nada lo llevo grabado tan a fuego.
A menudo no soy yo la que habla, es Ain Nokbi.

Fez, Marruecos.


22 de mayo de 2015

EL ANILLO DE BODA COMO GUARDAESPALDAS

Si hasta en páginas sobre Marruecos con cierta reputación, en uno de sus consejos principales a tener en cuenta para viajar al país, "se recomienda a las mujeres llevar una alianza para evitar ser importunadas por hombres"... ¿cómo no va a tener la gente una mala imagen del país? Qué horror, qué vergüenza y qué pena. De verdad, qué pena.

"Hace algunos años ya, mientras unos amigos se preparaban para viajar a Marruecos, tuve la oportunidad de leer los consejos de su guía de viajes. ¡¡Horror!! recomendaba a las mujeres llevar una alianza para evitar ser importunadas por hombres. Así de simple… sin más explicaciones. Como si el oficio de los hombres fuera importunar a la mujer soltera. ¿A qué se referían con importunar? ¿Y cómo te protege un anillo? ¿Es que las cosas malas sólo le pasan a las que están solteras? ¿Es que un criminal va a preguntarte si estás casada antes de perpetrar el crimen? ¿Acaso le importa? 
Un anillo no es un talismán, no es tu guardaespaldas y a no ser que tenga un estilillo heavy con algún pincho con el que puedas dejar K.O. a alguien con un derechazo… no tiene mayor utilidad para evitar ser importunadas por otro ser humano. (A parte, mi recomendación es no llevar nunca joyas de valor, pues te pondrás tú misma en el blanco de los posibles ladrones. Y un anillo de compromiso o de boda creíble tiene que tener cierto empaque ¿no?). La situación más común en la que podemos usar un anillo como excusa en occidente sería al enfrentarnos a un pretendiente espontáneo en un bar de copas, pero en Marruecos nada es como nosotros esperamos. 
Situación X: quitarte de encima al hombre que viene a ligar contigo con nocturnidad y alevosía enseñándole un anillo. Sí, en España a veces funciona en un bar cualquiera (lo que no entiendo es por qué decimos que tenemos novio/marido en vez de decir -no me interesas- que es la realidad…), pero también funcionaría insultarle y escupirle a la cara o actuar como una esquizofrénica. 
- Si te mueves en el ambiente turístico de la jet-set, tendrás las mismas complicaciones que en Europa. La mayoría de las discotecas de moda están dentro de los hoteles de lujo, así que lo más seguro es que te cruces con europeos y/o árabes que conocen muy bien la cultura europea, estás jugando en casa. 
- Si estás en una cafetería/terraza frecuentada por locales, lo más seguro es que no se acerque ningún hombre a ligar contigo, aunque te miren de reojo (y de frente). Si se te acerca alguno no pasa nada por darle una conversación educada (si te apetece) y si fuera necesario darle a entender que no estás buscando ningún tipo de relación. También puedes decir que lo sientes pero estás esperando a alguien y quitártelo de encima rápidamente. Seguro que te sorprenderá la educación con la que se dirigen a ti. 

Si en las situaciones anteriores sacas tu anillo a la defensiva y dices que estás casada, no te va a creer ni el Tato y vas a quedar de pena, seguramente se echarán unas risas a tu costa. Puede que de verdad lo estés, pero para un marroquí ver a una mujer casada, viajando sin su marido, en una discoteca, bebiendo cubatas… pues ya te imaginas tú misma qué clase de mujer casada se están pensando que eres. Lo que demuestra es que estás muerta de miedo, desvelando tú misma que eres una presa fácil a un posible depredador. Si quieres llevar un anillo y decirle a todo el mundo que estás casada… sé discreta y mantén la calma, déjalo entrever en la conversación. El mensaje subliminal de estar casada parece ser; hay alguien que vela o se preocupa por mí, ándate con cuidado conmigo. Si eso fuera cierto, tú tendrías que estar bien relajada. 
Por otro lado existen muchos jóvenes que hablan hasta por los codos, cándidos y simpáticos, puedes pasar un rato muy agradable con ellos. Hay mucha buena gente y es una alegría coincidir con alguna en un bus de 5h atravesando el país. Sería una pena que te negaras la oportunidad de no aburrirte enseñándole un anillo de compromiso como una tonta, porque como todo el mundo sabe, las mujeres casadas no hablan… 
Es difícil adivinar las intenciones de los hombres en una cultura diferente a la nuestra. La mayoría se contentará con charlar con una extranjera, otros querrán algo más… existen todos los tipos de persona que ya conoces, pero sus costumbres y su lenguaje corporal son diferentes. Aun así, salir airosa de la prueba es muy fácil, no aceptes nada que te sea incómodo o que no te dé buen rollo. Si no te fías, deja entrever a tu interlocutor que alguien sabe dónde estás (tus familiares por ejemplo, no hace falta que sea tu marido ficticio…) y que no estás sola. En cualquier caso si una situación no te gusta aléjate sin prisa, pero sin pausa y si tienes tiempo de hacer amistades, pide que te expliquen la complejidad del ligoteo marroquí."

Artículo original:
https://nomoretravelguides.wordpress.com/2015/01/12/mujeres-en-marruecos-llevar-alianza/ 

6 de mayo de 2015

LA NECESIDAD DE PENSAR(NOS) DE OTRA MANERA

Ella es Elena, una joven catalana enamorada de Marruecos desde hace ya tres años. Puestos a confesar, una de las mejores personas que me ha dado este blog.


"La necesidad de viajar, conocer nuevos lugares y culturas diferentes, siempre ha estado presente. Ese wanderlust que muchas y muchos tenemos y que muy pocas veces nos atrevemos a dejar fluir. Mi mochila ha dormido en muchos aeropuertos y estaciones de tren de Europa, incluso en la India, pero creedme que nunca lo ha hecho tan feliz como en Marruecos.


Porque Marruecos es más que ese wanderlust. Marruecos es parar el reloj y darle rienda suelta a todos los sentidos. Vista, tacto, olfato, oído, gusto... Marruecos son las ganas de perderse, para volver a encontrarse, y rehacerse si es necesario. Sonreír, y no poder dejar de hacerlo. Que nada tiene que ver con querer dejar de hacerlo.

Marruecos... es un antes y un después del que ya no hay marcha atrás. Ese momento exacto en el que te planteas qué mierdas haces con tu vida, si realmente estás donde quieres estar y haciendo lo que quieres hacer. Te sacude, desde el norte hasta el sur.


Marruecos nunca estará en tus planes, pero después será capaz de cambiártelos todos. Marruecos es tanto que todo lo que escribo me parece poco. La necesidad de pensar(nos) de otra manera. Más sana. Más humana. Marruecos son las ganas de darle vida a la vida. Más aún si se puede.

Tres años atrás mis pies aterrizaban de vuelta del primer viaje a Marruecos. Le han seguido tantos aterrizajes más, tantos sellos en el pasaporte, que a más de uno no le saldrían las cuentas."



Si quieres que tu historia también aparezca por aquí sólo tienes que pedirlo. Ponte en contacto conmigo e intentemos entre todos, desde nuestra experiencia personal, transmitir la realidad, buena y menos buena, de Marruecos.