16 de enero de 2016

SALAM ALEIKOUM, MUCHO MÁS QUE UN SALUDO

"Salam aleikoum" o "que la paz esté contigo", el saludo que siempre utilizan. Aunque en esta vida de errante he dicho "hola" y "adiós" en varios idiomas, nunca he hallado un saludo tan infalible como éste. Jamás nadie ha dejado de responder a mi deseo de paz. Jamás. He perdido la cuenta de las veces que he pronunciado "buenos días" ante amigos, conocidos y extraños y sólo he recibido como respuesta el eco de mi saludo perdiéndose en la indiferencia o el apuro de mi interlocutor. Lo mismo me ha ocurrido con el "ciao", el "bonjour", el "good morning" "hi" "how are you?", pero el "salam aleikoum" parece obligar a su destinatario a responder inmediatamente "aleikoum salam" con la fuerza de una orden, el hábito de un reflejo o la solemnidad de un protocolo no escrito. No atribuyo esta infalibilidad a una cuestión de educación. 



En otras costumbres cotidianas, mis vecinos marroquíes se saltan formas varias, reglas, normas cívicas y muestras básicas de respeto sin dudarlo ni un segundo, como lo hace cualquier hijo de vecino en Latinoamérica, Estados Unidos o Europa. Me gusta pensar que en realidad, ni la persona más mal educada del universo puede ignorar la fuerza intrínseca de un saludo que en lugar de simplemente desear una buena jornada, va más allá y pide por la paz de otro ser humano. Aquí no faltará quien me diga que estoy idealizando, que este lugar del mundo no se caracteriza justamente por ser un oasis de tranquilidad y que por el contrario, sobran guerras, muertes, luchas fratricidas, conflictos sectarios, atacantes suicidas y otros horrores dignos de mención. No dudo de la veracidad de esta lista de tragedias, pero desde que pronuncié por primera vez "salam aleikoum" en aquel abril de 2003 he sentido respeto y admiración por este saludo que sabe a juramento.

1 comentario:

  1. El poder del verbo, es tan importante lo que sale de nuestra boca.

    Salam Aleikoum.

    Por cierto gracias no sabia su significado ;-)

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