"Por favor,
sed vuestra mejor versión y aprended a esperar lo mejor de
vosotros antes de esperar nada de los demás. Quereos y cuidaos a vosotros
mismos, no olvidéis que es vuestra cara la primera que vais a ver en el espejo
cada mañana durante el resto de vuestra vida. Aseguraos de que tenéis las manos
limpias antes de señalar a nadie y acordaos de sacar la basura todos los días,
no os acostéis con una montaña de bolsas llenas de cosas que no tienen
valor alguno. Las moscas siempre encuentran la manera de entrar por las
ventanas.
Haced lo que
podáis por cambiarle la vida a alguien. Sed el motivo por el que otra persona
se levanta e intentad dejar cada lugar al que vayáis un poco mejor de lo que
estaba cuando llegasteis. Nunca os
olvidéis de donde venís, porque con los años os daréis cuenta de
que eso marcará cada nuevo camino que elijáis. Haced algo que vuestro ‘yo’ futuro
os pueda agradecer, y no os olvidéis de decir gracias. Compartid
las cosas buenas que os de la vida. Y digo compartir, no dar limosna. Compartir
es dar parte de algo que posees y que tiene valor, no es dar lo que te sobra y
no necesitas.
Pensad dos veces antes
de juzgar los actos de los demás. No importa lo que penséis ni cuán claros
tengáis vuestros principios. No importa lo que digáis o hagáis, porque la vida
siempre encontrará la manera de haceros entender que nunca estarás lo
suficientemente seguro de algo. Que las cosas cambian, cambian continuamente
igual que lo hacemos nosotros, y ‘nada’ no siempre significa ‘nada’ y ‘nunca’ a
menudo tampoco significa ‘nunca’.
Dejad que sea la
vida la que os ponga las barreras, no construyáis murallas a vuestro alrededor
porque algún día querréis saltarlas y no podréis. Dejaos los cuernos por lo que
queréis, no hay mejor recompensa que la que se obtiene haciendo algo
simplemente porque te da la real gana. Aprended a
guardar silencio pero ni se os ocurra callaros cuando veáis algo injusto,
porque todo gran cambio en la historia empezó con un grito. Escuchad a
vuestros padres, aunque sólo sea de vez en cuando, porque algún día os
acordaréis de ellos cuando no sepáis qué hacer. Elegid a quién queréis seguir hasta el fin del mundo y hacedlo, aunque os llamen locos,
aunque las turbulencias estén aseguradas. Hay vistas que siempre merecen la
pena.
Buscad un
lugar al que volver, porque tarde o temprano lo necesitaréis. Queda muy bien
decir que se es de todas partes y de ningún sitio, pero a la hora de la verdad
todos necesitamos cobijo. Cuando toméis una decisión llegad hasta el final,
porque sólo así podréis decir que lo habéis intentado. No perdáis de vista
que todo
esfuerzo tiene una recompensa y que lo que se siembra se
recoge.
Texto original: http://www.elcajondegatsby.com/semaforo-en-ambar/