22 de marzo de 2010

germany


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Esta vez no es un caprichoso. Es una maldita necesidad. Necesidad de que todo cambie. De las cosas empiecen a girar en el sentido opuesto. Como cuando meas. En Australia. Estaría bien poder forzar una situación. Pero nunca sale bien. Por tanto sólo queda esperar. Esperar… Como cuando arranca la montaña rusa. Y deseas que todo vaya más rápido. Pero no eres tú quien la controlas. Así que debes adaptarte a la situación. Porque no te queda otra. Sabiendo que tarde o temprano llegará el momento. Momento en el que estarás arriba. Con esa sensación única. Mezcla de excitación y miedo. Precisamente por eso, porque estás ahí arriba. Pero tarde o temprano vas a caer. Y es que así funcionan las cosas. ‘Es imposible parar algo inevitable.’ Lo único que debes tener siempre presente es que para llegar a estar arriba, antes tienes que haber estado abajo. Per collons.

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