Y NO EXAGERO SI DIGO QUE...

Que son las mejores botas del mundo. No digo todas las Dr.Marteens, digo estas. O las básicas negras. Muchos pensaréis: ‘Serán cómodas, porque bonitas...’ Pero eso es porque, como dice mi madre, siempre ha habido clases de gente y gente de clase. Otros tantos me entenderéis cuando digo que nunca un dinero fue tan bien invertido.

Todavía recuerdo cuando en 2º de la ESO la directora nos pilló por banda a unas cuantas ‘descarriadas’ para explicarnos que esas botas militares no eran ni mucho menos apropiadas para llevarlas con un uniforme escolar como el que por entonces lucíamos cada día. No hay nada como ser ignorante en esta vida.

Son comodísimas, tienen una suela que da gusto, son flexibles, la piel es buenísima, dan el calor necesario en cada momento, son resistentes, te las puedes poner en todas las épocas del año, duran muchísimo, sirven para cualquier tipo de ropa... Tienen fuerza, tienen garra, tienen personalidad. Es que son una PASADA, joder.

(Parece que me subvencionan. Pero no, no. Todo es por amor al arte.)